Cómo quitar el mal aliento con diferentes infusiones y tés aromáticos

A pesar de que se tenga una excelente higiene bucal, de igual forma se puede tener mal aliento y será necesario solucionarlo lo más pronto posible. Conocer cómo quitarlo es importante, ya que ese mal olor es molesto no solo para los demás sino para quien lo padece. De acuerdo con las explicaciones que han sido dadas por especialistas, es probable que este inconveniente se deba al padecimiento de enfermedades gastrointestinales.

¿Qué es la halitosis y cómo superarla?

El mal aliento, también conocido como halitosis, es una afección que puede aparecer por diversas causas, como la mala higiene bucal y el tabaco. Puede ser la causa de incomodidades, inseguridades y, en casos más graves, es posible que la persona que lo sufra presente ciertos efectos psicológicos. No obstante, aprender cómo quitar el mal aliento no es muy complicado, ya que siempre hay ingredientes naturales que sirven para aliviar problemas de salud.

Menta

La primera de las ideas para terminar con el mal aliento es la infusión de menta. Es precisamente por sus propiedades refrescantes que esta planta se usa para la elaboración de pastas dentífricas y enjuagues bucales. Aparte de esto, cuenta con una acción desinfectante de deja un aroma bastante fresco y agradable en la boca.

Preparar esta infusión en casa requiere de una cucharada de hojas de menta y una taza de agua. Una vez que el agua haya hervido y siga caliente, incorporar las hojas de menta y dejar en infusión por unos 10 minutos antes de consumir. Cuando haya reposado, se debe colar la infusión y tomar después de las comidas. Otra manera de usarla para un mejor bienestar es como enjuague bucal.

Hinojo

Si el mal aliento es una consecuencia de una mala digestión, los expertos recomiendan tomar infusiones de hinojo. Esto se debe a que se trata de una planta que posee propiedades antibacteriales y por su contenido de anetol. Preparar este té no es nada complicado. Solo se tiene que colocar una cucharada de semillas de hinojo, junto con una cucharada de anís verde.

Primero se debe machacar las semillas y luego añadir agua para que hiervan. Por último, el líquido hay que colarlo y dejar que repose por lo menos cinco minutos. De la misma forma que la infusión anterior, este té de hinojo tiene que consumirse luego de las comidas.

Anís

El té de anís es un excelente aliado que permite neutralizar los olores desagradables en la boca. Sobre todo cuando una de las causas de la halitosis es el consumo de alimentos fermentados y fuertes. Donde los ingredientes comunes son los ajos y las cebollas.

Esta infusión hace mucho más sencilla la digestión de las comidas pesadas, disminuyendo el nivel de acidez que afecta de manera significativa el pH de la saliva. La manera correcta de consumirlo es después del cepillado de los dientes. Recordando que existen dos tipos de anís, el estrellado y el español. A diferencia del estrellado, el anís español es una especia fina y con menos sabor y olor.

El anís también posee propiedades antiinflamatorias y analgésicas. De igual manera, el anís es de gran utilidad para aliviar los gases, vómitos, hinchazón, digestión lenta y diarrea crónica. También es útil para calmar el nerviosismo que tiene que ver con el estrés y funciona muy bien para combatir el insomnio.

Salvia

Esta es una hierba que contiene abundantes propiedades para la salud, incluso los especialistas la recomiendan como tratamiento para la halitosis. Ya que es de gran ayuda para restablecer las secreciones de la saliva, combatiendo también las bacterias que se acumulan en las encías y los dientes.

Es muy sencillo preparar esta infusión, solo basta colocar unas cuantas hojas de salvia en agua hirviendo por 15 minutos. Una vez hecho esto, se tiene que colar el líquido y consumir después de las comidas. También se le puede añadir unas gotas de zumo de limón.

Jengibre

Otra de las infusiones perfectas es la de jengibre. Este es un alimento que posee más de 100 sustancias diferentes. La infusión de jengibre es un remedio bastante popular para el alivio de las náuseas y las afecciones estomacales. Las cuales pueden generar un terrible mal aliento.

Para su consumo se tiene que colocar a hervir agua y añadir el jengibre, dejar hervir por cinco minutos y dejar que repose. Colar la infusión de jengibre y añadir zumo de limón. Por último, se debe servir en una taza y colocar miel si es necesario endulzar.

Manzanilla

Se trata de una de las infusiones más populares, ya que posee diversas propiedades y beneficios para la salud bucal. Su uso es bastante amplio y esto es posible sobre todo por sus propiedades antiinflamatorias y antisépticas. Por lo que es un perfecto remedio para aliviar los problemas gastrointestinales que afectan en gran medida el aliento de la boca.

¿Cuáles son las causas de la halitosis o mal aliento?

Es evidente que la gran mayoría de los casos de mal aliento inician en la boca, y son varias las posibles causas que se pueden mencionar:

Alimentos:

La descomposición de las pequeñas partículas de alimentos en los dientes y en sus alrededores, puede incrementar la cantidad de bacterias y provocar un olor desagradable. Consumir determinados alimentos, como los ajos, las cebollas y especias, también generan la presencia de mal aliento. Después de la digestión, los alimentos ingresan en el torrente sanguíneo, son transportados hasta los pulmones y afectan gravemente el aliento.

Mala higiene bucal:

Al no cepillar bien los dientes y utilizar el hilo dental todos los días, se acumularán partículas en la boca y producirá mal aliento. Se forma encima de los dientes una película incolora y pegajosa conformada por bacterias conocida como placa. Cuando existe ausencia de cepillado, la placa genera irritación en las encías y por último, llena de placa los dientes. Provocando también mal olor.

Productos que contienen tabaco:

Fumar produce su propio olor que es bastante desagradable. Los fumadores y aquellos que consumen tabaco, son más propensos a tener las encías enfermas, siendo otra de las fuentes del mal aliento.

Medicamentos:

Hay medicamentos que contribuyen con la sequedad de la boca y debido a esto, de manera indirecta provoca mal aliento. Otros a menudo se descomponen en el organismo y liberan ciertas sustancias químicas que son transportadas hasta el aliento.

Boca seca:

La saliva es de gran ayuda para la limpieza de la boca, ya que permite que se eliminen las partículas que causan el mal olor. Existe una enfermedad conocida como boca seca, que contribuye a la aparición de la halitosis. Esto a menudo ocurre durante las horas de sueño y es por eso que se produce el mal aliento de las mañanas. Empeorando si se duerme con la boca abierta. En caso de que este problema sea crónico, provocará problemas en las glándulas salivales.

Infecciones en la boca:

El mal aliento puede ser provocado por heridas quirúrgicas luego de una cirugía bucal. Como por ejemplo la extracción de algún diente, o porque se tienen caries, llagas bucales o alguna enfermedad que afecta las encías.

Afecciones en la nariz, boca y garganta:

Existen ocasiones donde el origen del mal aliento es debido a pequeñas piedras que se forman en las amígdalas, que se cubren de bacterias y producen un olor desagradable. Infecciones o inflamación en los senos paranasales, la nariz o la garganta, contribuyen en gran medida en la aparición del mal aliento.

Otras causas:

Como consecuencia de las sustancias químicas que producen, enfermedades como el cáncer y problemas como los trastornos metabólicos pueden provocar un olor desagradable en la boca. Así mismo, el reflujo crónico de los ácidos estomacales, puede estar asociado con el mal aliento. Por otro lado, en los niños pequeños, el mal aliento puede ser ocasionado por la presencia de un objeto extraño, como algún pedazo de alimento que se aloja en las fosas nasales.

¿Cuáles son los síntomas del mal aliento?

La halitosis puede variar de acuerdo a su causa que no ha sido diagnosticada. Algunas personas sienten mucha preocupación por el mal aliento, pese a que tengan muy poco o no tengan ningún olor en la boca.

Mientras que hay casos donde las personas tienen mal aliento y no lo saben. Debido a este inconveniente, es más complicado hacer una evaluación del propio aliento, por lo que es una buena idea pedir la ayuda de un amigo cercano o pariente para resolver las dudas.

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Fuentes: El Universo, Semana, MayoClinic.