¿La moda sostenible tiene género?

Por Camila Hermida, Voz Universo MOLA en Colombia.

Vestir es algo que las personas que vivimos en sociedad hacemos todos los días, casi de manera automática. Hombres y mujeres de todas las edades eligen cada mañana sin falta la combinación de prendas que vestirán, y este proceso nunca deja de repetirse.

Si lo vemos en este sentido, la moda es un mundo sin géneros en el que todos somos partícipes, aunque algunos más que otros. Ya que vestimos por necesidad, podríamos decir que se trata de un tema que nos involucra a todos, sin importar nuestra edad o género.

Sin embargo, desde hace varias décadas, la moda es un tema de carácter femenino en el imaginario de las personas. La preocupación por la apariencia, el pensar lo que está o no de moda y en si nos vemos bien o mal, es algo atribuido casi por completo a las mujeres.

Aunque en años recientes se ha visto más interés por parte de los hombres en las tendencias y en el vestir en gran medida por el uso de las redes sociales, la moda sigue siendo asociada a un género en particular.

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La moda sostenible no es ajena a esta creencia. Cada vez hay más marcas que producen prendas con prácticas amigables con el planeta y también con las personas, pero un gran porcentaje de ellas crean prendas únicamente para mujeres.

Existen propuestas genderless – es decir sin género – en marcas que producen prendas básicas como camisetas o sacos, pero no es tan común que se creen marcas con valores sostenibles que estén, desde el inicio, dirigidas a un mercado masculino.

Dejando de lado el carácter femenino que se le atribuye a la moda como industria, la sostenibilidad también es un concepto que se relaciona con lo femenino, aunque este sea un tema transversal a todo lo que hacemos como habitantes del planeta.

marcas sostenibles que rompen paradigmas

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Vivimos en un mundo que asocia el cuidado del medio ambiente, la protección de otros seres y la preocupación por el bienestar de quienes nos rodean como rasgos femeninos, porque históricamente las mujeres siempre han sido asociadas con estos roles de cuidado. Este puede ser uno de los factores que aleje a la cuestión de la sostenibilidad del público masculino.

A pesar de esto, hay marcas que están empezando a dirigirse a una audiencia masculina interesada en la moda – en especial en el streetwear o el estilo casual – que funcionan como puertas al mundo de la sostenibilidad desde la moda.

Una de ellas es True, una marca colombiana originaria de Medellín, que se caracteriza por tener prendas sin género y es reconocida en el medio musical colombiano. Se define como una marca que crece de forma responsable, evitando el desperdicio, produciendo únicamente las prendas necesarias y que aprovecha los sobrantes de producción tanto como sea posible.

Otras marcas como Bohío Playa y Paréntesis, también colombianas, toman la sostenibilidad como una cuestión que se puede incorporar en el guardarropa fácilmente, dirigiéndose a un público similar. Aunque la producción a partir de materiales reciclados (PET recuperado en ambos casos) sea un gran valor agregado, es clara la forma en la que, a través de una estética actual, estas marcas sin género pueden llegan a muchos rincones y consumidores inesperados.

Cada día serán más los creadores y diseñadores que entiendan que la moda no tiene género, ¡y la sostenibilidad tampoco! Aún son muchas las barreras y pre-concepciones que derribar en ambos campos, pero con el tiempo y las ideas frescas de nuevas generaciones el cambio está llegando.