Parálisis de sueño: qué es y cuáles son las causas

La parálisis del sueño está dentro de la clasificación internacional de los trastornos del sueño, se sitúa dentro del grupo de las parasomnias.

Se trata de una afección en la cual la persona no puede moverse ni hablar cuando apenas se queda dormida o al despertarse, es decir es la incapacidad transitoria para realizar cualquier tipo de movimiento voluntario. Aparece en las transiciones entre el estado de sueño y la vigilia.

[También puede interesarte: Home Salud Emocional ¿Qué es la parálisis de sueño y cómo controlarla?]

Lo insólito de este trastorno es que se está totalmente consciente de lo que está sucediendo. El cerebro de la persona está despierto pero el cuerpo no. La persona que se encuentra bajo esta parálisis está cognitivamente despierta pero su lado físico no lo está, viviendo esta sensación de paralización en casi toda la musculatura, exceptuando los ojos y el diafragma respiratorio.

Es por eso que estos episodios se pueden vivir con mucha angustia ya que las personas no suelen entender bien qué está sucediendo y el no entender porqué no hay movimiento voluntario posible. Si bien es desconcertante y causa mucha ansiedad, la parálisis de sueño no es grave ni es un fenómeno paranormal.

¿Cuánto duran los episodios?

Es variable su duración. Generalmente son de una duración corta, de entre veinte segundos hasta dos minutos. Lo importante es que el paciente sepa que que no corre ningún peligro y que pasado este lapso de tiempo, la parálisis cederá espontáneamente y sin consecuencias.

¿Qué pueden experimentar las personas que sufren parálisis de sueño?

1) Los episodios pueden estar acompañado de alucinaciones (que en realidad son pseudoalucionaciones ya que la persona que las padece sabe que no son reales). Pueden ser auditivas, visuales o táctiles. Muchos testimonios de pacientes hablan de sentir presencias cerca de la cama, ver especies de "monstruos" entre otros fenómenos.

2) La primera vez que se sufre de este trastorno, puede suceder que la persona crea que está muerta o que ha sufrido un accidente accidente isquémico transitorio. Esto es normal ya que no puede mover ninguna parte de su cuerpo. Pero como hemos dicho anteriormente, aunque cause mucha ansiedad y angustia, no es grave.

¿Por qué sucede?

Para comprender lo que es esta parálisis debemos entender cómo funciona el mecanismo del sueño. El ciclo del sueño consiste en dos estadios. El REM (estadio de movimientos oculares rápidos) y el NO REM (sin movimientos oculares rápidos). Una persona hace entre 4 y 6 ciclos por noche. En la primer parte de la noche predomina el estadio REM y en la segunda parte de la noche el NO REM. En esto consiste el sueño normal.

Durante el período REM se tiene una actividad cerebral muy alta, similar a la que se tiene cuando se está despierto. Al haber mucha actividad mental, lo que realiza el cuerpo es sacar de cierta manera el tono a los músculos y así evitar que nos movamos mientras dormimos. Es decir tener los músculos aislados es útil para no movernos de acuerdo a lo que estamos soñando.

La parálisis de sueño se da cuando se produce un retraso en la aparición del tono muscular. Por ende, la persona se despierta y puede mover solamente los ojos. No hay ninguna enfermedad o lesión, simplemente es es una alteración funcional en la vuelta del tono muscular como salida del REM.

[También puede interesarte: 8 consejos para mejorar la calidad del sueño]

las Causas

Si bien no se conoce la causa exacta de la parálisis de sueño, las investigaciones muestran que éstas pueden ser algunas de sus posibles causas:

1) No dormir lo suficiente o privación del sueño

2) Tener horarios de sueño-vigilia irregular (por ejemplo aquellas personas que hacen horarios nocturnos o turnos rotativos)

3) Dormir boca arriba

4) Atravesar un momento de estrés

5) Jet lag

¿Cómo prevenir estos episodios?

La clave está en no angustiarse. Podemos evitar que aparezca la parálisis durmiendo lo suficiente, tener horarios de sueño regulares, practicando algún tipo de meditación o mindfulness para disminuir el estrés, no dormir boca arriba, realizar técnicas de relajación antes de acostarnos, pero sobretodo no pensar en esto cuando estamos por dormir.