Conocer cuál es el eneatipo más peligroso dentro de las personalidades es uno de los intereses más marcados dentro de la sociedad y una de las mayores preocupaciones del último tiempo, ya que más de uno quiere saber cuáles son las características de los sujetos que los rodean e incluso las propias. De hecho, en los últimos meses descubrir qué es el eneagrama y cómo determinar cuál es el eneatipo más peligroso es una de las búsquedas más realizadas en internet, lo que da cuenta que es un tema que se está metiendo en la agenda de la sociedad.

Pero, para determinar cuál es el eneatipo más peligroso es necesario tener en cuenta realmente que es un eneagrama, para qué sirve, y cuáles son los objetivos de conocer en detalle el perfil de cada uno de las categorías existentes.

Eneatipo más peligroso
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Y es que esta herramienta de estudio de las personalidades las agrupa en nueve tipos diferentes, conocidos como eneatipos, que sirven para clasificar a cualquier individuo según rasgos generales de los sujetos.

Lógicamente, cada persona es diferente, pero existen características que suelen ser comunes en algunas de ellas, las que las hacen poder agruparlas en nueve tipos diferentes. Conocer cada grupo, sirve para tener en cuenta debilidades, fortalezas, virtudes y defectos de la gente y ser más empático y objetivo.

Aunque algunos consideran que el eneatipo más peligroso es el eneatipo 8, cada uno de los grupos tienen cosas que los hacen más o menos dañinos o inofensivos según lo que cada persona considere y con quién se relacione.

Sin embargo, en esta oportunidad hablaremos en detalles sobre el eneatipo 8, por qué se lo considera peligroso, cuáles son sus características, puntos fuertes, débiles y qué deben trabajar estas personas para mejorar y ser más fuertes.

¿Qué es el eneagrama y para qué sirve?

Antes de hablar sobre los rasgos de la personalidad que hacen que un sujeto se encuentre dentro del eneatipo 8, es necesario conocer un poco más sobre a qué hace referencia el término eneagrama y para qué le sirve a una persona conocerlo.

El tan conocido y buscado “eneagrama de la personalidad” es una herramienta que funciona como un espejo interno que pone en evidencia el comportamiento del ser humano. Es un espejo hacia el interior de las personas pero también hacia el exterior: refleja exactamente cuáles serán los comportamientos y formas de ser de cada uno según al grupo al que correspondan.

Y es que si bien cada persona es diferente al resto, y cada una tiene su manera de relacionarse y comportarse no sólo por su naturaleza sino también por su educación y vivencias, a partir de esta herramienta se pueden determinar rasgos comunes y generales que dividen a la sociedad en nueve grupos diferentes denominados eneatipos.

No es novedad que cuanto más herramientas de autoconocimiento se tengan, mejor será el resultado. No sólo para uno mismo, sino para la manera en la que las personas se relacionan.

Y es que a partir del eneagrama los individuos logran conocerse mejor, entender ciertos comportamientos, aceptarse, saber por qué se relacionan de determinada manera, y poder cambiar ciertas conductas que no gustan o que pueden resultar dañinas para otras personas.

Pero no sólo se trata de autoconocimiento. Entender y comprender los diferentes grupos, como el eneatipo 8, es un beneficio a la hora de relacionarse con otras personas. Esto permitirá comprender conductas o rasgos de otros sujetos que no se comparten, ser más objetivos y empáticos con el resto.

En síntesis, a partir del eneagrama es posible detectar las virtudes y fortalezas, así como las debilidades y patrones y formas de ser que podrían cambiarse para poder mostrar la mejor versión de cada uno. Además, le permite a una persona trabajar sobre los comportamientos que los limitan. A partir del mismo será posible potenciar aquellos puntos positivos y reconocer y manejar los negativos o aquellos que no agradan demasiado.

Si bien esta herramienta no va a borrar o acabar con ciertas diferencias e incluso discusiones entre las personas, si colaborará a que todos sean más comprensivos, flexibles y tolerantes ante una situación que le es ajena, ya que se comprenderá la forma de pensar y actuar en base a los eneatipos.

Otro de los puntos positivos de esta herramienta es que a partir de la misma es posible tratar síntomas que han derivado de situaciones traumáticas de la infancia o adolescencia, como así también de hechos concretos de la actualidad que generan, entre otras cosas, ansiedad, obsesiones, depresión, baja autoestima y fobias.

Si alguna vez te ha pasado de preguntarte por qué siempre tropiezas con los mismos problemas es hora de que lo averigues. A partir del eneagrama podrás descubrirlo, así como también ayuda a identificar qué pensamientos limitan a un ser humano y lo impiden avanzar.

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Eneatipo más peligroso: características, fortalezas y debilidades

Ahora que ya conoces en detalle que es el eneagrama y que existen nueve grupos diferentes, hablaremos sobre el eneatipo más peligroso, para algunos el número 8.

Si te reconoces como una persona con seguridad muy marcada, que a veces puede resultar avasallante, sin pelos en la lengua y que tiene formas un tanto agresivas, con gran energía y que afrontan cualquier situación que se les presente, puedes considerarte dentro de este tipo así que a continuación van algunos detalles para que tengas en cuenta.

Eneatipo más peligroso
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A este tipo de personas se las conoce como sujetos que tienen un marcado ego, y que por lo general quieren tener el control de todas las cosas. Como suelen ser autoritarios, un tanto arrogantes y agresivos se los considera el eneatipo más peligroso de los nueve existentes.

Sin embargo, no alcanza sólo con saber cuáles son los rasgos y características generales. Para poder cambiar conductas que molestan o bien ser un poco más empáticos con el entorno es necesario comprender el por qué de estas.

Por ejemplo, la situación de querer controlar todas las situaciones y ámbitos de la vida tiene que ver con un miedo que estas personas tienen en su interior de que el resto pueda dañarlas y someterlas. Prefieren mantenerse al frente de las cosas para evitar que las dominen.

Es por eso que suelen ser o parecen un tanto agresivas y están a la defensiva, ya que se ponen una especie de armadura para evitar que las lastimen. Atacan para no ser atacados y no toleran que nadie les diga lo que tienen que hacer.

Se suele considerar que este tipo de actitudes están impulsadas por un miedo inconsciente a ser heridos y controlados por otro, aunque bajo su coraza suelen ser personas tiernas y con una debilidad marcada.

En síntesis, algunas de las características del eneatipo más peligroso podrían resumirse en las siguientes:

  • Quieren estar al mando de las situaciones para evitar que los lastimen o someterse a otras personas y pensamientos.
  • Son personas lujuriosas a las que siempre les gusta tener más y más poder.
  • Aunque son vistos por los demás como sujetos fuertes e independientes, debajo de su armadura esconden vulnerabilidad, debilidad y miedo a ser dañados.
  • Vinculado a esto, se conoce que este tipo de personas demuestran sus sentimientos reales sólo con un grupo reducido de individuos.
  • Suele intimidar con su mirada y con sus frases directas, honestas y avasallantes.
  • Sus ataques de ira y violencia son provocados en la mayoría de las ocasiones por su sentimiento de vulnerabilidad hacia el resto y por miedo a perder el control.

Ahora ya conoces el eneatipo más peligroso de los 9 existentes. Ya sea porque te sientes identificado con este grupo, como porque tienes allegados con este tipo de personalidad, ahora sabrás interpretar las reacciones y ser más tolerante al respecto.

Fuente: Borja Vilaseca