Por Ornella Zagatti*

Este año el presidente Municipal de Hermosillo, Antonio Astiazarán Gutiérrez, anunció que Hermosillo fue seleccionada entre más de 600 ciudades del mundo como ganadora del Global Mayors Challenge (Desafío Global de Alcaldes) para el financiamiento y acompañamiento técnico de la estrategia “Biciclando”.

En simples palabras, este proyecto consiste en un sistema de recolección de basura reciclable por medio de una red de mujeres que viajan en bicicletas electro asistidas. A través de una aplicación móvil, se conecta a los ciudadanos del barrio con las denominadas “Bicicladoras”.

“Biciclando” surgió del pueblo y el Gobierno Municipal adoptó la idea y la ha venido afinando y enriqueciendo desde el Instituto Municipal de Planeación Urbana y del Espacio Público (IMPLAN), con la colaboración de la sociedad civil hermosillense y asesoría técnica de Bloomberg Philanthropies. El proyecto estuvo a cargo de José Carrillo Atondo, director general de IMPLAN.

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Esta iniciativa tiene varios puntos a destacar

Por un lado, el impulso de una economía circular. Si bien en nuestro país, como por fuera de él, hubo un crecimiento de gran envergadura en relación con la forma de consumir y en la que los residuos puedan ser reutilizados, todavía es bajo el porcentaje de personas que efectivamente reciclan la basura como corresponde.

También, podemos resaltar que este programa tiene una importante perspectiva de género. Las “Bicicladoras” son las mujeres encargadas de acercarse hasta la basura reciclada y llevarla hacia los centros de reciclaje intercambiándola por un ingreso económico. De esta manera, se genera empleo, las mujeres consiguen una ayuda para sus respectivas familias y el beneficio termina siendo recíproco. Además, se logra colaborar con una causa ambiental y bajar el grado de basura desperdiciada.

Basándonos en estadísticas, en Argentina se genera un promedio de 45.000 toneladas diarias de residuos sólidos urbanos, lo que equivale a una tonelada de basura cada dos segundos. Esto, lógicamente, tiene un impacto negativo en el ambiente. Los rellenos sanitarios utilizados en centros urbanos para la disposición de los residuos domiciliarios son grandes fuentes de gases de efecto invernadero (GEI), principalmente metano, un gas 21 veces más reactivo que el CO2 con relación al cambio climático.

Este tipo de iniciativas y medidas ideadas en México, así como en otros lugares del mundo, sirven para tomar una conciencia a nivel mundial: desde lo que puede parecer una acción mínima (cómo reciclar la basura del hogar) hasta llegar a una idea de modelo sostenible global para reducir el impacto ambiental.

En definitiva, esta aplicación móvil apuesta por la sustentabilidad, la economía circular y también abre una gran posibilidad de empleo y crecimiento para el género femenino. Por lo tanto, son este tipo de campañas las que deben replicarse, admirarse y, por qué no, tomarlas como un estilo de vida ya que apuestan a un futuro más consciente.

* Miembro del Área de Relaciones Institucionales en el Centro de Desarrollo Sustentable GEO de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA.