Muchas veces se acercan a nuestro consultorio personas con afecciones que se prologan desde hace mucho tiempo. Molestias digestivas que tenemos hace años, dolores menstruales que no ceden, acidez y mal aliento, comidas muy restrictivas porque todo me cae mal.

Los síntomas que sufrimos a diario al ser inespecíficos y no muy graves o agudos, los dejamos que se queden con nosotros y sin darnos cuenta pasa el tiempo y nos afectan la calidad de vida cada vez más, hasta que ya no recordamos como era sentirse 100% bien.

Sin embargo, aunque no seamos del todo conscientes, se va generando un estado proinflamatorio continuo en nuestro organismo, predisponiendo a la aparición de otras patologías y complicaciones, sin mencionar que la afectación de nuestra calidad de vida, humor, ganas de hacer las cosas es también de una gran relevancia y merece que le destinemos nuestro tiempo para solucionarlo.

En las consultas personalizadas, integrales y naturales de Makam contamos con la técnica MUNAWARA especialmente diseñada para el tratamiento de patologías crónicas. Munawara consta de maniobras físicas que realizamos sobre el paciente utilizando su propio cuerpo enfocados en su movimiento natural, los ejercicios de respiración y la estimulación neurosensitiva para ayudar a la persona a recuperar su equilibrio interno. Son maniobras relajantes, no dolorosas pero efectivas.

Además, identificamos junto al paciente los elementos o hábitos que lo enferman generando estrategias en conjunto para recuperar su estado de salud y bienestar que van a apoyar el tratamiento, permitiendo que la patología no vuelva a aparecer.

Cada persona, cada paciente es única y a pesar de que tenga la misma patología, edad y factores de riesgo, requiere un tratamiento diferente que contemple sus particularidades y lo atraviese en todas la áreas de su vida, maximizando su posibilidad de vivir en salud.

Ilustremos una situación aparente altamente repetitiva en el consultorio, Marta es una mujer que todos los días sufre de mal aliento en las mañanas, reflujo y acidez alternado con épocas de dolor y distensión abdominal post prandial. Ha visto varios médicos y descartado patología orgánica pero su malestar continua. Conversamos para conocernos e involucrarnos en la historia personal de Marta, sus miedos, preocupaciones, cotidianidad, ritmo, gustos y prioridades.

Juntas identificamos las estados que empeoran esta sintomatología para entonces proceder a explicarle por qué le pasa lo que le pasa, no está en su imaginación y tiene una razón de ser y es importante que Marta lo sepa, de manera de poder lidiar con ello. Una vez identificados los problemas, develamos las soluciones, proponemos un plan de tratamiento con la técnica Munawara e incorporamos nuevos hábitos a su rutina que aportan a su equilibrio y bienestar con el objetivo de ir moviendo su balanza vital hacia una vida en salud y plenitud.

Además, enseñamos cuatro ejercicios básicos especialmente diseñados para estimular el sistema circulatorio, inmunoendocrino, renal y respiratorio para que la persona pueda realizar en la tranquilidad de su casa cada día y lo ayude a mejorar su calidad de vida, manteniendo el contacto permanente con el cambio que conlleva en su vida el regresar al estado de salud.

Fomentamos un estado de consciencia, de relajación y manejo del estrés que va a beneficiar ampliamente al paciente, potenciando los frutos del tratamiento instaurado.

MUNAWARA es una técnica de amplia aplicación pensada para abordar cada persona en su padecimiento crónico desde todas las áreas que componen su ser, el manejo del estrés, la alimentación, su cotidianidad, la actividad física, el sueño y por supuesto las maniobras y ejercicios necesarias para restablecer el equilibrio físico a su malestar. Lo realizamos de manera consensuada y en conjunto con el paciente, reconociendo la importancia del rol activo que cumplimos cada uno en nuestra salud.