La ansiedad y el estrés son problemas muy reales con los que algunas personas tienen que luchar diariamente. Algunos los sufren como resultado de la tensión natural que aparece durante el trabajo y la rutina diaria. Sin embargo, hay otros que tienen propensiones naturales a la ansiedad. Esas personas deben tener mucho cuidado y desarrollar técnicas para contrarrestar sus efectos.

Estas son seis prácticas saludables que te ayudarán a combatir la ansiedad del día a día.

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Ansiedad: cuándo es normal y cuándo es un verdadero problema

Realiza ejercicio

Practicar algún ejercicio o deporte no solo nos te ayuda a mantenerte físicamente en forma, sino que también tiene efectos psicológicos positivos. Algunos estudios demuestran que la actividad física está ligada con las emociones positivas. Esto se debe a que reduce el cortisol, la hormona del estrés.

Por lo general, los expertos recomiendan hacer unos 30 o 40 minutos de ejercicio al día. Esto tendría el efecto a corto y largo plazo de mejorar el estado de ánimo, prevenir la ansiedad y la depresión.

Aprende a respirar

En las personas con cuadros clínicos de ansiedad, uno de los síntomas característicos es la dificultad para respirar o la sensación de ahogo. Es por eso que practicar la respiración adecuada puede ser muy importante, incluso si tu caso no es tan grave.

Por aprender a respirar nos referimos a hacerlo de la forma más apta. El yoga, por ejemplo, nos ayuda a respirar profundamente y con toda la capacidad de nuestro cuerpo.

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Lleva una dieta equilibrada

Lo que comemos influye también en nuestro cerebro. Para mantener una mente más sana y libre de ansiedad, es recomendable llevar una dieta rica en fibra y en ácidos grasos esenciales. Estos mejoran la microbiota intestinal, que está asociada con los trastornos de depresión y estrés.

Opta por remedios naturales

Algunos remedios equilibran el sistema nervioso tan bien como algunos fármacos, ayudándonos a alcanzar un estado de profunda relajación, pero sin efectos secundarios. Para evitar la ansiedad severa y sentirte más relajado, puedes usar lavanda, pasiflora o hipérico.

En caso de que el tuyo sea un caso que requiera intervención médica, puede que sea necesario tomar suplementos, como magnesio o lisina. De nuevo, esto solo debes hacerlo bajo supervisión médica.

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Disfruta de la vida

Parece obvio, pero puede ser difícil tomarse el tiempo para disfrutar el mundo que nos rodea cuando nos sentimos agobiados por el trabajo y por nuestro entorno. Llena tu día a día de personas, cosas, y actividades que te llenen de alegría y de sentimientos positivos. Asegúrate de encontrar aquello que te inspire y te llene de satisfacción.

Cuando estamos ocupados disfrutando de lo que amamos, la ansiedad y el estrés se reducen naturalmente.

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Terapia

En última instancia, si, a pesar de todos estos intentos, no ves que tu ansiedad disminuya, es posible que sufras de una condición médica. En estos casos, buscar el apoyo de un profesional puede dar resultados muy positivos. Un experto evaluará tu caso y te ayudará a dar con las causas del problema.

¿Sufres de ansiedad con frecuencia? ¿Cuál de estas prácticas te parece mejor? Cuéntanos tu experiencia y comparte con tus amigos.

Importante: Debe aclararse que Bioguía no da consejos médicos ni receta el uso de técnicas como forma de tratamiento para problemas físicos o mentales sin el consejo de un médico, sea directa o indirectamente. En el caso de aplicar con ese fin alguna información de este sitio, Bioguía no asume la responsabilidad de esos actos. La intención del sitio es solamente ofrecer información de naturaleza general para ayudar en la búsqueda de desarrollo y crecimiento personal.

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